Caminito del Falla vuelve a las tablas del teatro. Constantino Tovar se encarga de la composición de la música y la letra, mientras que la dirección es de José Luis Otero.
Después de unos minutos de montaje de los grandes molinos de atrezo, se sube el telón y la comparsa de Tino Tovar entra en escena. En la presentación, indican que siguieron una senda hasta llegar al Falla con la motivación de seguir los pasos de otros autores y carnavaleros.
El primer pasodoble cuenta la historia de Laura, una mujer que cuida de su familia y que trabaja haciendo 30 horas de guardias en el hospital. Denuncian los ataques a los sanitarios que se dejan la vida por el resto y encima reciben malos tratos. Se preguntan dónde han quedado los aplausos y los agradecimientos por parte de la ciudadanía. Piden que los ciudadanos no lo paguen con los sanitarios: «que los culpables son otros que a la salud han puesto en venta y con tus votos gobiernan».
La segunda letra va dedicado al pueblo gaditano. Mediante palabras que se dicen en la ciudad como aliquindoi, reivindican que las condiciones para vivir en la ciudad de Cádiz son muy precarias.
El primer cuplé se burla del cambio de los signos del zodiaco y hace un chiste con Santiago Abascal. El segundo cuplé comenta varias anécdotas que se han vivido en el COAC y critica que haya muy pocos gaditanos entre el público. «Me dicen en Cádiz por el mes de febrero que lo dejo todo siempre para el final, que este año no llego. Y yo siempre contesto cuando me tienen frito que voy de caminito, voy de caminito», así es el estribillo completo de esta comparsa.
En el popurrí, describen el camino que hacen para llegar al Gran Teatro Falla y comentan las sensaciones de concursar. Desarrollan más a este personaje: un loco por las coplas del Carnaval de Cádiz que camina hasta llegar al Falla.
Aquí termina el camino de semifinales hacia al Falla de estos comparsistas.