‘Los sacrificaos’, la comparsa a la que pone autoría Jonathan Pérez Ginel, vuelve a presentarse en el Falla para pelear por un hueco en la gran final.
La comparsa del Jona, ‘Los sacrificaos’, cierran la noche de hoy. Unas luces violetas apuntan a los componentes de la primera fila y las espaldas de sus tipos dibujan la silueta de un peón de ajedrez. En la presentación, explican que son unos «sacrificaos» por «cantar lo que he cantado» con libertad.
El primer pasodoble critica la precaria situación de los trabajadores y trabajadoras del sector de la industria. Denuncian que no se respetan los derechos de estos y la cantidad de accidentes laborales. Piden que el pueblo gaditano se levante de nuevo «con tornillos y tuercas» y luchen por lo que es suyo. «Astilleros no se cierra» así responde el público.
En la segunda letra, la comparsa nos muestra la situación del Carnaval de Cádiz desde artesanos, amas de casa que cosen y los propios componentes. Critican que el Estado siempre «saquean» a los pobres, y que las rentas más altas se libran.
En la tanda de cuplés, comentan la cantidad de puestos de trabajo ya no son necesarios y la eficacia de las alarmas de las casas. «No sé qué tienes, chiquilla, que siempre me sacas de mis casillas» es el final de un estribillo que se hace difícil de pronunciar.
En el popurrí, dedican una cuarteta a explicar cómo los peones obedecen y desarrollan sus vidas «casilla por casilla». Comparan la vida en España con un tablero de ajedrez, dónde lo importantes es salvar al rey con sus privilegios. También denuncian la inflación, cómo las empresas y bancos se lucran de esta situación y cómo les ahoga el cinturón de las deudas. En otra cuarteta, pone en valor la capacidad de aguante del pueblo gaditano.
Se despiden estos peones de ajedrez del público de semifinales.